Con ocho jugadores lesionados –casi todos titulares–, poco se podía hacer ante un equipo colombiano que llegaba plagado de estrellas. De los once que mandó José Pekerman (técnico cafetero) al gramado del Estadio Nacional, nueve militan en Europa y uno en México. Es decir, no había que ser un conocedor para saber que los ‘colochos’ partían como favoritos pese a jugar en Lima.
¿Y el peso de la localía? El apoyo del hincha siempre se siente y esto motiva a los jugadores; sin embargo, sabemos que en estos tiempos pesa cada vez menos. Hoy por hoy, un buen planteamiento, un juego organizado y futbolistas con recorrido internacional son mucho más determinantes que el estadio donde se desarrolle el encuentro. Además, ¿qué tan decisiva podía ser la localía frente a un elenco al que no le ganamos desde 1981 en Lima por Eliminatorias?
Ojo, esto no quiere decir que Perú haya jugado mal y que Colombia lo haya hecho muy bien. Los once de Sergio Markarián se dieron íntegros y pelearon cada balón con determinación.
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