Código penal. Los íntimos perdieron 4-2 en la
definición desde los doce pasos contra la Unión Española tras haber
igualado 1-1 en el tiempo regular.
Si hubo un equipo que debió llevarse el triunfo en los 90 minutos de juego ese debió ser Alianza Lima.Porque en muchos pasajes del partido se mostró como un grupo compacto, serio, con mucho criterio para movilizarse y empezó ganando el partido. Sin embargo, se dejó estar, le cedió el balón a su rival hasta dejarse empatar por la Unión Española y decidió su suerte para llegar a las semifinales de la Libertadores Sub 20 en la ruleta de los penales. Ahí no le fue nada bien y cayó por 4-2 provocando una gran tristeza en el pueblo blanquiazul.
Desde el primer minuto el equipo victoriano quiso borrar esa mala imagen que dejó en su compromiso del viernes pasado frente al Defensor Sporting. Por ello salió decidido a buscar el arco de enfrente. Imprimió vértigo de tres cuartos de cancha hacia arriba en la cancha del Estadio Monumental. Destacaron Saúl Anicama en la recuperación de balón, Wilder Cartagena en su labor de tomar la lanza y apuntar hacia el área rival y Junior Ponce buscando hacer daño por todo el frente de ataque.
Así llegó el primer tanto del partido: Ponce desbordó por derecha y cedió un pase a Cartagena que en primera sacó un remate que dejó sin chance al portero Gabriel Guerra.
En la segunda etapa la Unión Española cambió de libreto y asumió el rol de protagonista. Manejó con criterio el balón, centró su ataque por las bandas y mostró orden táctico. En el remate final el cuadro chileno estuvo más acertado y así logró la igualdad por intermedio de Ramses Bustos de cabeza. El 1-1 fue definitivo y se fueron a penales donde los chilenos mostraron mayor oficio y ganaron 4-2. Larenas, Gattas, Saavedra y Donadell anotaron para los mapochinos. Aparicio y Guerrero convirtieron para los íntimos pero fallaron Cuba y Vidales.
Sabía que...
“Les pido disculpas a los hinchas. Fallé un penal y me da mucha bronca. Sin embargo, nos vamos con la cabeza en alto”, dijo el defensa Rodrigo Cuba, quien terminó con lágrimas en los ojos.
Por su parte, Saúl Anicama apuntó: “Me siento orgulloso de jugar por Alianza. Lo dimos todo en este campeonato. Me voy con la frente en alto”.dlr
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