Milagro monumental 

Juan Aurich empata 1-1 ante River Plate en el último minuto y sueña con la clasificación a octavos de la Copa Libertadores 

Por Por Ricardo Narváez

“En el fútbol todo es posible” y “goles que no haces, goles que te hacen” deben haber sido las frases más usadas para definir el empate 1-1 de Juan Aurich ante River Plate en el intimidante y mítico Estadio Monumental de Buenos Aires.

A los 89 minutos, Marcos Delgado silenció a medio país y levantó a otro con un gol que hizo olvidar la frustración, preocupación y decepción que causó el pésimo desempeño del ‘Ciclón’. Por segunda vez en dos semanas, unos peruanos fueron los aguafiestas que rieron y se abrazaron frente a miles de hinchas que se retiraban de su estadio con odio en la mirada.

Los chiclayanos sacaron un punto de oro en Argentina y continúan segundo del Grupo 6 con cinco puntos. Sin embargo, la algarabía del resultado conseguido no puede opacar el desempeño que ayer mostró el cuadro rojo.       

Previo al encuentro, Roberto Mosquera advirtió que se vería otro Aurich en la vuelta, en referencia al 1-1 de la ida. Que se vería a un equipo similar al que despertó en el segundo tiempo en el norte tras un replanteo en el sistema y un café cargado en el camerino.

Sin embargo, ayer se vio el mismo nerviosismo y desorden de ese primer choque, pero con la diferencia de que esta vez las falencias fueron aún más marcadas, además de tener al frente a un rival nublado de cara al arco que dejó ir una goleada en casa.

No aprendieron

El DT nacional apostó por el mismo 3-5-2 que, a pesar de tener más hombres apostados en la marca -Delgado y Céspedes, los laterales volantes nunca subieron-, fue ampliamente rebasado por un cuadro ‘millonario’ que tocaba  muy bien en el medio campo, pero que no era claro en el último pase.

Los locales tuvieron unas tres claras antes del gol de Mercado a los 25’. El defensa aprovechó un rebote tras una inconclusa ‘tijera’ de Gutiérrez y le reventó el arco a Gallese ante la pasividad de la zaga peruana.

Luego, para el segundo tiempo Mosquera entendió que un replanteó era necesario e hizo ingresar a Ubierna para contener en el medio campo y a Valoyes para tener más agresividad en la delantera. Su esquema ahora era un 4-3-3. Aurich ganó equilibrio y ahora pisaba mucho más el campo contrario.

Las modificaciones ayudaron, pero lo que no cambió fue su debilidad defensiva que originó que River hiciera a Gellese el mejor del partido con hasta cuatro extraordinarias tapadas, asistidas por tres palos que mantuvieron su arco fuera de una goleada. Los que fallaban los locales era increíble y una de las frases del inicio ya comenzaba a escucharse.

Ayuda divina

Fue así que cuando ya se vivían los últimos minutos del partido y los rojos ya se la jugaban con todo en campo contrario, Ramos pivoteó un centro que dejó a Delgado solo frente Chiarini para romperle las redes argentinas con un misil. 

En las dos últimas fechas el ‘Ciclón’ visitará a San José en Bolivia (7 de abril) y recibirá a ya clasificado Tigres en Chiclayo (15). Mosquera y compañía podría alcanzar la segunda fase del certamen a falta de una fecha si es que vence a los altiplánicos y River cae ante el poderoso e invicto cuadro azteca de visita.

Dato

Tigres lidera el Grupo 6 (10 pts.) seguido de Aurich (5), River (3) y San José (3) dd